Advertir la naturaleza de ruidos en el motor puede proporcionar pistas importantes al taller a la hora de resolver una avería.
De esta forma, los ruidos sincronizados con la rotación del motor pueden ser de distintos tipos. Entre ellos, destacan los repiqueteos por muelles de válvulas flojos o en mal estado, o los ruidos en aros de pistones por estar rotos o desgastados. Estos últimos son parecidos a un ruido metálico sordo y provocan el ascenso del consumo de lubricante.
También se pueden causar detonaciones metálicas o picado en la cámara de ignición como si una pieza de metal estuviera suelta como resultado del uso de gasolina de baja calidad, una mezcla de aire combustible con abundancia de oxígeno o un distribuidor en mal estado. Por lo que se refiere al ruido de máquina de coser, este se produce por la holgura excesiva entre los empujadores y la cola de las válvulas.
En cuanto a los ruidos en cilindros con cada rotación del motor, estos advierten de fallos en cilindros, pistones o válvulas, y son el signo de averías potencialmente graves y, en cuanto aparecen, es oportuno detenerlo y examinarlo. En tal contexto, puede detectarse un ruido sordo y profundo que significaría que un pistón está a punto de griparse como resultado de una mala lubricación. El golpeteo metálico es otro de los ruidos que se pueden escuchar y suele estar provocado por el contacto de alguno de los pistones con una válvula y puede indicar una avería grave del motor.
Otros ruidos típicos del motor puede ser petardeo en aceleración y proviene de defectos en las juntas de escape, ruido de carraca cuando una pieza no está bien fijada y roza con otras partes metálicas. Además, si el motor se sobrecalienta, es posible que los cojinetes de la bomba de agua estén en mal estado. También puede producirse un ruido de carraca al girar, que significa que el nivel de aceite en el cárter es insuficiente y, al girar, el motor trabaja casi en seco. Por último, el ruido residual de los pistones se produce cuando se saca la llave del contacto. Se distingue del picado del motor en que no tiene un resonancia férrea y puede estar causado por abundancia de carbonilla, deficiente ajuste del ralentí o porque el motor está trabajando a temperaturas demasiado altas.